martes, 1 de febrero de 2011

Escribir

Escribir, escribir por escribir. A veces no sabes que hacer, ver la tele, escuchar música, llamar por teléfono, dar una vuelta... Hay muchas cosas que escoger y yo escogí escribir, pero es complicado esto de escribir sin tener una idea fija de qué hacer así que te pones y haces escritura automática. Da igual el sentido de las frases que escribas o lo bien o mal que queden, escribes, dejas fluir la mente, te desestresas, te relajas, vives por y para cada palabra que tecleas. Probablemente de entre estas palabras no salga nada que será recordado como algo grande ni maravilloso, probablemente ni siquiera os agradará el texto pero a mi me ha servido para mucho. Me ha servido para aliviar tensión, me ha servido para deshagarme, me ha servido para aprender que escribir es algo genial y maravilloso. He aprendido que cuando dejas la mente en blanco y escribes lo primero que se te pasa por la cabeza, los malos pensamientos fluyen, las ideas negativas se van y todo aquello que nos preocupa o nos preocupaba espera a que acabemos esta última palabra.
Canción del Post: Acquiesce (Oasis)